Toda nuestra antiguas creencias
pueden ser sometido a duda por alguna razón rechazadas como falsas
opiniones. Salvo que por mas que dude y niegue la realidad es indudable
que existo yo, que las pongo en duda o las niego.
Solo se podría haber
dicho Descartes que pienso y esto no lo puedo dudar.
Todo lo demás: Dios,
cielo, tierra y cosas de la tierra, etc., son cosas pensadas, mientras
no pueda demostrar con evidencia son cosas reales.
Todo salvo mi pensamiento,
voy a colocarlo en un paréntesis de intelectual. Sin embargo no
puedo negar que veo el sol y que siento su calor. Antes había afirmado
esta verdad y ahora descubro y hay modos por los cuales pienso: ver, sentir,
juzgar y imaginar; así estos otros: afirmar, negar o dudar. Ahora
que sea realizado este descubrimiento hay que tener mas cuidado en la forma
de analizar los pensamiento, sin que esto vaya a significar pronunciarse
sobre la realidad del sol y su calor, se debe tener cuidado de tratar todas
las cosas como "cosas meramente pensadas" y nada más.
Hay algunos pensamientos
que son como imágenes o representaciones de las cosas en que creía.
A este genero se le llama "ideas". En todo caso algunas de estas ideas
por el hecho de ser representaciones eran como copias de las cosas reales.
Hay algunas ideas nacidas con uno (las ideas innatas); otras como provocadas
por una causa (las ideas adventicias); las inventadas liberalmente inventadas
por una fantasía (las ideas ficticias). Hay ideas que son connaturales
al espíritu poseo de una idea de un Dios, aunque nada sepa por el
momento de su existencia.
Mientras mas pienso en esta
idea que tengo de Dios, ella no puede tener su origen en mi. Así
que la idea tiene que haber sido provocada por algo verdaderamente infinito:
Dios mismo, y, por tanto, es indudable que Dios existe.
Se posee la idea de un ser
perfecto, Dios, debe ser pensado como existente, resulta imposible pensar
la perfección separada de la existencia. Por tanto Dios existe.
Puede suceder
también que ni siquiera tenga ojos para ver cosa alguna; pero no
puede suceder que cuando veo o cuando pienso que veo –no distingo entre
ambas cosas- yo, que tal pienso, no sea alguna cosa.
LA REALIDAD DEL MUNDO
Dado que Dios no puede engañarme,
acaso la causa de los errores, residan en el empleo que hago de mis propias
ideas.
Sin embargo surge la posibilidad
del error, de la replica o de la confrontación de opiniones. El
error empieza cuando afirmo o niego algo de algo.
Las ideas verdaderas solo
son aquellas ideas que se presentan con claridad y distinción.
Claro que es para Descartes
un conocimiento presente y manifiesto a un espíritu atento. Se contrapone
a conocimiento oscuro. Es distinto un conocimiento preciso y totalmente
diferente a los demás.
Respecto a los géneros
de las ideas antes mencionados (innatas, ficticias, adventicias).Se le
han llamado así porque creía que su causa se encontraba fuera
del pensamiento , independiente de la voluntad. Todas la cosas materiales
son tal como nos las representan las ideas que de ellas tenemos en el espíritu.
Hay razones para aceptar
que las ideas adventicias provengan de, o tengan por causa, una realidad
que no es el pensamiento y que no es Dios.
La primera razón es
que nada hay en tales ideas adventicias que se refiera o presuponga mi
pensamiento, la otra razón es que la aparición y desaparición
no depende de mi conciencia , sino de la misma realidad que designan. Estas
son las razones en que respecta a la posibilidad de que provengan de mi
propio pensamiento.
Ahora respecto de la segunda
opinión , aun aceptando que las ideas adventicias estén causadas
por los objetos externos, no tendríamos porque sacar las consecuencias
que han de ser semejantes a ellas. Por el contrario.
Por una parte tenemos al
"yo pienso", indivisible, inespacial, garante de si mismo y de toda la
verdad. Tal sustancia por el hecho de dudar, revela su ser limitados, finito.
Ahora bien, de una tal constatación se desprende como hemos vistos,
que no a podido darse ella misma el ser (puesto que se lo hubiese dado
perfecto e infinito). El "yo pienso" ha recibido, por tanto el ser de una
sustancia espiritual llamado Dios.
Y tenemos por otra parte,
la sustancia externas, divisible, continua, una sola en todas sus manifestaciones:
la naturaleza. Sin embargo, tampoco la naturaleza puede darse el ser a
si misma, por lo que también es una sustancia creada.
Tenemos, por ultimo, lo que
es primero en el orden del ser, cual es la sustancia infinita, Dios, que
ha dado el ser y mantiene en el ser a las otras dos sustancias.
EL HOMBRE
La filosofía cartesiana
se inicia como la exigencia de una reconquista de la subjetividad: de la
potencia del pensamiento individual se pretende hacer surgir el criterio
de verdad de todas las cosas y de la reconstrucción de todo el saber.
Así, el hombre, pese el destronamiento astronómico cumplido
por Copérnico y Galileo, recupera, por el lado de la filosofía
el centro de todo lo que es.
Ni Dios ni el universo pueden
arrebatar al individuo la responsabilidad de ser el o su pensamiento el
único punto de partida legitimo, el fundamento de toda la verdad.
EL DUALISMO CARTESIANO
El hombre esta constituido
de dos realidades; por una parte, por el espíritu: yo soy una sustancia
que piensa. Por otra, por mi cuerpo: poseo un cuerpo, por el que estoy
en medio del mundo material. Pertenezco, pues, a dos reinos del ser que
no parece tener una medida común: al reino del pensamiento, inespacial,
indivisible, etc., y a la materia corporal, espacial, divisible, etc. Estos
dos reinos, unidos en algun punto, forman el todo individual que es el
hombre.
...pues,
aunque parezca que poder burlar es señal de sutileza o potencia,
sin embargo, querer burlar es, sin duda alguna, un signo de debilidad o
malicia, por lo cual no puede estar en Dios.
LAS REGLAS PARA LA DIRECCION
DEL ESPIRITU
En primer termino, la intuición
que la define como la concepción de un espíritu atento, tan
distinta y clara que no queda ninguna duda sobre lo conocido: así
cada cual puede intuir que existe, que esta pensando o que un triángulo
esta limitado por tres líneas o que una esfera no tiene nada mas
que una superficie.
Para alcanzar estas intuiciones
primeras, básicas, Descartes propone algunas reglas, cuya aplicación
podemos reconocer en parte en el trabajo que hemos venido haciendo a propósito
de nuestra duda metódica:
I Regla: No admitir como
verdadera cosa alguna que no la reconociese como evidencia como tal, es
decir, debemos evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención
, y evitar además de no comprender en mis juicios nada mas de lo
que se me presenta tan clara y distintamente en mi espíritu, que
no tenga ocasión alguna de ponerlo en duda.
II Dividir cada una de las
dificultades que examinara en tantas partes como se pudiera y requiriera
su mejor resolución.
III Conducir ordenadamente
mis pensamientos, comenzando por los objetos mas simples y mas fáciles
de conocer, para ascender poco a poco, gradualmente, hasta el conocimiento
de los mas compuestos, e incluso, suponiendo asimismo un orden en aquellos
que no preceden naturalmente uno de otro.
IV Hacer en todo enumeraciones
tan completas y revisiones tan generales, para estar seguro que no he omitido
nada.
BLAS PASCAL
(1623-1662)
Las obras de Pascal son de
lo mas variados contenidos. Sobre los opúsculos científicos.
Entre sus obras no científicas mas conocidas: las Provinciales,
obra polémica de contenido teológico y moral; se han encontrado
los originales de su reflexión sobre la Grecia, un compendio sobre
la vida de Jesús, Meditaciones cristianas, cartas espirituales y
otros. Los textos agrupado desde 1670 bajo el titulo de pensamiento son,
en su mayoría, notas y esbozos escritos en hojas sueltas y pedazos
de papel, en vista de un libro de Apologética.
El pensamiento de Renato
Descartes como un pensamiento de ruptura. Y se puede entender esto ya sea
como una confrontación o como un mero desinterés respecto
de aquellos que el pensamiento anterior predominante había tenido
por verdadero o por digno de ser investigado.
Por una parte el cartesianismo
se cruza con una sólida tradición inglesa que, en general,
imperturbable frente a la abalancha cartesianas, seguirá su camino,
su método y sus intereses propios.
Al margen del cartesianismo,
la experiencia religiosa va madurando sus problemas y contraposiciones.
Surge primero en el siglo XV, los movimientos reformistas que se venían
incubando ya desde los tiempos de Occam, y la respuesta a estos movimientos:
la contrarreforma católica, cuyo centro espiritual es España;
concretamente, la Compañía de Jesús.
Cuando aparecieron las meditaciones
metafísica de Descartes (1641), Pascal tenía 18 años.
Ya había presentado a la academia de Francia un célebre ensayo
sobre las Secciones Cónicas. Extraordinariamente dotado para la
investigación y las ciencias devoró, aún adolescente,
todo el saber de la tradición matemática.
"El hombre
es un problema cuya solución se encuentra en Dios". Boutroux, a
propósito de Pascal.
Famosas son también
sus experiencias y anotaciones sobre fenómenos naturales. Desgraciadamente
se han perdido gran parte de estas experiencias.
Esto en lo que concierne
a las Ciencia exactas, las abandonó posteriormente, requerido, mas
bien, absorbido por la preocupación normal y religiosa.
Abandona, pues lo que el
llama espíritu geométrico por el espíritu de la fineza,
que versa sobre las cosas de Dios y del hombre. Y es así como escribe
lo que lo consagra como literato y pensador profundo: Pensamiento que,
como lo señalábamos, son las recolecciones de sus apuntes,
familiares, amigos y posteriormente, estudiosos de sus pensamiento han
estado ordenado las materias; la obra Provinciales, jugoso testimonio de
la disputa jesuita-jansenista en torno el problema de la responsabilidad
humana.
El pensamiento de Pascal
es en gran medida la respuesta del religioso al cataclismo copernicano.
Como científico, Pascal no podía cerrar los ojos antes un
hecho indiscutible: físicamente hablando, el hombre no es, y nunca
a sido el centro de la creación. En la creación no parece
haber centro, ni ente privilegiado. Pero, como hombre religioso, Pascal
siente que con el destronamiento de la Tierra, nos hemos perdido en el
Universo infinito y Dios se nos ha perdido de vista.
Baruch Spinoza
(1632-1677)
filósofo racionalista
y pensador religioso holandés, considerado como el exponente moderno
más completo del panteísmo. Nacido en Amsterdam de padres
judíos hispano-portugueses el 24 de noviembre de 1632, Spinoza recibió
una educación que ponía un gran énfasis en el estudio
de las fuentes clásicas judías. Más tarde, sin embargo,
se apartó del judaísmo ortodoxo como consecuencia de sus
estudios de ciencias físicas y por el efecto que le produjeron los
escritos del filósofo inglés Thomas Hobbes y del científico
y filósofo francés René Descartes. Se apartó
de la sinagoga y en 1656 fue excomulgado por los rabinos, que le desterraron
de Amsterdam.
Durante cinco años,
Spinoza permaneció en las afueras de la ciudad, puliendo lentes
para vivir. Durante ese periodo escribió su primer trabajo filosófico,
Tractatus de Deo et Homine Ejusque Felicitate (Tratado de Dios, del hombre
y de su felicidad), donde se prefiguran ya las líneas maestras del
que sería su sistema filosófico. El Tractatus Theologico-Politicus
(Tratado teológico-político) y la disertación De Intellectus
Emendatione (De la reforma del entendimiento) quizá fueron escritos
también en este periodo, aunque el primero no se publicó
hasta 1670 y el segundo hasta 1677. En 1661 se trasladó a Rinjnsburg,
ciudad cercana a Leiden, y dos o tres años más tarde a Voorburg,
no lejos de La Haya. Poco después, al trasladarse a La Haya, se
le ofreció una cátedra de filosofía occidental en
la Universidad de Heidelberg. El responsable de ello fue Charles Louis,
el elector palatino. Sin embargo, Spinoza rechazó esta responsabilidad,
para poder mantenerse libre de cualquier restricción que pudieran
aplicar los teólogos sobre sus actividades intelectuales. También
rechazó una pensión que le ofreció el rey de Francia
Luis XIV, a cambio de que dedicara al monarca uno de sus trabajos.
Filosofía occidental
La más completa expresión
de Spinoza es su gran obra Ethica Ordine Geometrico Demonstrata (Ética
demostrada según el orden geométrico, 1674). De acuerdo con
este tratado, el universo es idéntico a Dios, que es la 'sustancia'
incausada de todas las cosas. El concepto de sustancia, que Spinoza saca
de los filósofos escolásticos, no es el de una realidad material,
sino más bien el de una entidad metafísica, una base amplia
y autosuficiente de toda realidad. Spinoza admitió la posible existencia
de atributos infinitos de la sustancia, pero mantuvo que tan sólo
dos son accesibles a la mente humana, a saber, la extensión, o el
mundo de las cosas materiales, y la racionalidad. El pensamiento y la extensión
existen en una última realidad que es Dios, de quien dependen. La
causalidad, en el sistema de Spinoza, puede hallarse entre los objetos
individuales (es decir, entre los cuerpos físicos) en el atributo
extensión, o entre ideas individuales en el atributo pensamiento,
pero no entre objetos e ideas. Para explicar las aparentes interacciones
causales entre objetos e ideas, Spinoza propuso una teoría conocida
como paralelismo, según la cual cada idea tiene un complemento físico
y, del mismo modo, cada objeto físico tiene su correspondiente idea.
Spinoza explicó la
individualidad de las cosas, ya fueran objetos físicos o ideas,
como modos particulares de sustancia. Todos los objetos particulares son
las formas de Dios, contenidas en el atributo extensión; todas las
ideas particulares son las formas de Dios contenidas en el atributo pensamiento.
Las formas son natura naturata, "naturaleza creada" o naturaleza en la
multiplicidad de sus manifestaciones; la sustancia, o Dios, es natura naturans,
"naturaleza que crea todo lo que hay" o naturaleza en su unidad creativa,
actuando como el factor determinante de sus propias formas, las cuales
son transitorias y su existencia adopta una forma temporal; Dios es eterno
y trasciende todos los cambios. Por consiguiente, las cosas particulares,
ya sean extensión o pensamiento, son finitas y efímeras.
Spinoza mantuvo, no obstante, que existía un mundo indestructible.
Ese mundo no se puede encontrar en el terreno de las cosas existentes sino
en el de la esencia. El intuitivo conocimiento humano de Dios es la fuente
de un amor espiritual de Dios (amor Dei intellectualis), que a su vez es
parte del amor en el que Dios se ama a sí mismo.
El concepto de esencia de
Spinoza está relacionado de modo muy intenso con el concepto escolástico
de 'verdadero' y con las ideas arquetípicas formuladas por Platón,
aunque se distingue de ambos en algunos aspectos trascendentes. Spinoza
concebía las esencias como hipostatizaciones del aspecto universal
de todas las cosas. La diferencia fundamental entre las existencias y las
esencias en la cosmología de Spinoza es que, mientras las primeras
tienen su ser en el tiempo, las segundas están fuera del ámbito
temporal. Dado que la mortalidad puede pertenecer en exclusiva al ámbito
de las cosas sujetas a la ley del tiempo, el ámbito de las esencias,
al no hallarse sometido a las leyes del tiempo, tiene que ser en consecuencia
eterno. No obstante, el campo de las esencias es un terreno de existencia
inmanente.
Cada existencia tiene, como
se ha indicado, un carácter universal o esencial aunque para realizar
ese carácter la cosa existente tiene que trascender su propia forma
intrínseca, es decir, liberarse a sí misma de las limitaciones
de su propia estructura. El terreno de las esencias, por este principio,
tiene una especie de ser en el ámbito de las existencias (siendo
el primero la inminente causa del segundo) aunque no comparte su limitación
temporal. La causalidad inmanente, de acuerdo con la metafísica
de Spinoza, significa autocausalidad, y aquello que es autodeterminado
es libre. Desde este razonamiento, Spinoza desarrolló su doctrina
de la libertad como un bien que sólo se puede alcanzar en el terreno
de las esencias. La existencia en sendos atributos (extensión y
pensamiento) es esclavitud ya que cada cosa existente está determinada
por sus propias series causales y la forma de su ser está determinada
por ellas. Sólo en lo atemporal, en la existencia autocausada, es
decir en lo universal y lo inmanente, es posible la libertad completa;
sólo con la identificación con la sustancia, o Dios, se obtiene
la inmortalidad y con ella la paz.
Rechazo de lo tradicional
Spinoza rechazó la
providencia y la libertad de la voluntad, y su concepto de un dios impersonal
fue recibido con hostilidad por muchos de sus contemporáneos. Su
posición en la historia de la filosofía es única en
muchos aspectos. No perteneció a ninguna escuela y no fundó
ninguna. Aunque en ciertos puntos su trabajo se basaba en el de algunos
de sus predecesores, muestra y afirma un individualismo tan acusado como
para que se le pueda considerar un simple continuador o epígono,
incluso en el caso del pensamiento de Descartes. Por la profundidad y la
grandeza de sus ideas y su notable capacidad de síntesis, Spinoza
se sitúa junto a los mayores pensadores filosóficos de todos
los tiempos. Hasta un siglo después de su muerte, ocurrida el 21
febrero de 1677, su pensamiento no obtuvo reconocimiento y, aunque su sistema
no consiguiera seguidores organizados, ha tenido, tal vez, la más
penetrante influencia de todos los filósofos modernos con la excepción
de Immanuel Kant. No sólo metafísicos sino también
poetas como Johann Wolfgang von Goethe, William Wordsworth y Percy Bysshe
Shelley han consultado y estudiado los trabajos de Spinoza en busca de
inspiración y su pensamiento ha influido en el panteísmo
poético subyacente de muchas interpretaciones modernas de la naturaleza.
Locke y
Hume
Locke y Hume constituyen,
junto a Berkeley, los máximos representantes del empirismo. Se conoce
como empirismo la doctrina filosófica que se desarrolla en Inglaterra
en parte del siglo XVII y el siglo XVIII, y que considera la experiencia
como la única fuente válida de conocimiento. Sólo
el conocimiento sensible nos pone en contacto con la realidad. Teniendo
en cuenta esta característica, los empiristas toman las ciencias
naturales como el tipo ideal de ciencia, ya que se basa en hechos observables.
John Locke
(1630-1704)
cursó estudios de
teología, química y medicina en Oxford. Allí entró
en contacto con la doctrina escolástica y la teoría de Descartes.
Es la formulación clásica del empirismo inglés. Parte
del principio de que todo conocimiento, incluso el abstracto es adquirido,
y se basa en la experiencia, rechazando las ideas innatas. El objeto de
conocimiento son las ideas, definidas como contenido del entendimiento
y sin ningún carácter ontológico, ya que son el resultado
directo de la sensación o la reflexión (ideas simples), o
el resultado de la actividad asociativa de la inteligencia humana (ideas
compuestas). No representa un empirismo radical y acepta el conocimiento
por demostración, no fundamentado en la experiencia, (como la demostración
de la existencia de Dios por el argumento cosmológico o teleológico),
y la validez de conceptos originados por el sujeto (como los matemáticos
o geométricos).
Sus obras más importantes
son:
Ensayo sobre el entendimiento humano
Tratado sobre el gobierno civil
La racionalidad del cristianismo
David
Hume
(1711-1776)
estudió en un primer
momento Derecho, pero pronto se dedicó a la Filosofía. Su
filosofía proviene a la vez del empirismo de Locke y del idealismo
de Berkeley. Trata de reducir los principios racionales (entre otros la
casualidad) a asociaciones de ideas que el hábito y la repetición
van reforzando progresivamente., hasta llegar, algunas de ellas, a adquirir
una aparente necesidad. Por lo tanto, las leyes científicas sólo
son para los casos en que la experiencia ha probado su certeza. No tienen,
pues, carácter universal, ni es posible la previsibilidad a partir
de ellas. La sustancia, material o espiritual no existe. Los cuerpos no
son más que grupos de sensaciones; el yo no es sino una colección
de estados de conciencia. Es el fenomenismo.
Sus principales obras son:
Tratado sobre la naturaleza humana.
Investigación sobre el entendimiento
humano
Investigación sobre los principios
de la moral
Crítica al innatismo
y al concepto de causa
El empirismo supone una crítica
a los racionalistas bajo el supuesto que la razón tiene carácter
ilimitado, e incluso el propio proceso irracional puede producir cualquier
tipo de conclusión. La razón por sí misma no tiene
fundamento y funciona a partir de supuestos. Por tanto, sólo se
considera válido los conocimientos adquiridos mediante la experiencia.
Recordemos que según
Descartes las ideas pueden ser innatas, adventicias y facticias. De todas
éstas las que para Descartes confieren mayor fiabilidad son las
innatas; a partir de éstas, los racionalistas fundamentan la realidad,
demostrando la existencia del Yo, Dios y el mundo.
Los empiristas entienden
por ideas todo aquello que es objeto de conocimiento; Locke incluirá
las percepciones, mientras que Hume no. Tanto Locke como Hume admiten un
subjetivismo del conocimiento y sostienen que no conocemos realmente la
realidad, sólo las ideas sobre ésta.
Locke sostiene, contra la
teoría de las ideas innatas de Descartes, que todos nuestros conocimientos
tienen su origen en nuestra experiencia, tanto externa (a través
de los sentidos), como interna (a través de la razón) -para
él, al nacer, nuestra mente es como una hoja en blanco que se irá
llenando con nuestra experiencia-.
Demuestra la inexistencia
de las ideas innatas tanto teóricas como prácticas en las
partes 1ª y 2ª del Ensayo sobre el Entendimiento Humano. Afirma
que si existieran ideas o principios innatos todo el mundo las poseería
(niños, idiotas,...) y además todos tendríamos los
mismos conocimientos. La idea de Dios, por considerarse innata, tampoco
existirá y por tanto no tenemos asegurado una certeza de verdad
en las demás ideas.
Locke respeta el cogito cartesiano:
Pienso, luego existo. Por tanto, del YO tenemos certeza intuitiva.
Para demostrar la realidad
extramental, recurre a la casualidad. De DIOS no tenemos una idea innata
pero su existencia se puede demostrar mediante la casualidad, porque es
el creador del mundo y de nosotros; tenemos pues certeza demostrativa.
Del MUNDO tenemos la certeza de que es la causa de nuestra impresiones;
se trata pues de una certeza sensitiva.
Hume representa un empirismo
más radical. No acepta el concepto de ideas de Locke y Descartes,
puesto que afirma que nuestro conocimiento se basa en:
Impresiones, obtenidas mediante los
sentidos.
Ideas, copias o representaciones
de las impresiones.
El criterio de certeza de
las ideas para Hume es simple: una idea será verdadera cuando provenga
de una impresión, cuando podamos señalar la impresión
de la que proviene.
Según este criterio
podremos tener certeza de las ideas actuales que se correspondan a una
impresión, o aquellas ideas coincidentes con impresiones pasadas.
No tenemos pues certeza de
las ideas futuras puesto que carecemos de impresiones. Aún así,
en nuestra vida cotidiana creemos tener certeza de lo que pueda suceder
en el futuro:
Llueve® la calle se mojará
Lo que hacemos es que establecer
una conexión necesaria entre 2 hechos: se han de producir unos hechos
(efecto), porque antes se han producido otros (causa). Pero si aplicamos
estrictamente el criterio de verdad, no advertimos ninguna condición
necesaria y por lo tanto no podemos tener certeza de que el hecho será
cierto. Lo que ocurre es que tenemos una sucesión de impresiones
anteriormente repetidas, pero que es incomprobable que vuelva a suceder.
Y aunque esto nos pueda ser
útil en la vida cotidiana, dice Hume, lo que no podemos hacer de
ninguna forma es utilizar la casualidad para pasar de una impresión
a algo de lo que carecemos de impresiones. Por ejemplo:
Dios es la causa de nuestra
existencia
Nuestra existencia
Dios
EFECTO
CAUSA
Impresión
Algo de lo que no tenemos
impresión
Y como no tenemos ninguna
impresión del YO, DIOS o el MUNDO, no es válido el argumento
de casualidad, y por lo tanto no podemos tener certeza de que existan.
Para Hume sólo podemos
quedarnos en una sucesión de simples fenómenos: es pues fenomenista.
Origen y constitución
de la experiencia.
Para los empiristas, el origen
de nuestro conocimiento es la experiencia.
Las ideas de las sustancias
con las que nosotros tenemos contacto son incognoscibles, pero dichas sustancias
han de existir puesto que son la causa y la unidad de las cualidades sensibles.
Supongamos que tenemos ante
nosotros un objeto cualesquiera; de él podemos percibir unas determinadas
cualidades: su color, su olor, el tamaño,... Pero lo que realmente
no podemos llegar a percibir es la esencia de ese objeto, su sustancia.
¿Será ese objeto la suma de las cualidades perceptibles (sabor,
color, olor, ...)? No, porque podremos cambiar algunas de esas cualidades
y seguir teniendo la misma sustancia (una rosa por ejemplo seguirá
siendo una rosa aunque no huela, o aunque esté de color marchito).
Sin embargo, nosotros imaginamos que hay una estructura, igual para todos
las rosas, que es el soporte de las cualidades sensibles, que le da
unidad y a la vez es causa de dichas cualidades sensibles.
Hume no acepta las mismas
nociones de idea y casualidad, lo que le lleva a afirmar que la existencia
de la sustancia es indemostrable; para él los fundamentos de la
experiencia serán distintos, aunque coincida con otros empiristas
en que el límite de nuestro conocimiento es la experiencia sensible.
Hume hizo una distinción
entre 2 modos de conocimiento, aunque dejando claro que cualquier conocimiento
proviene en última instancia de la experiencia:
Relaciones entre hechos: se
expresan mediante juicios de hecho o juicios sintéticos,
es decir, aquellos en los que lo que se define o predica del sujeto no
está contenido en el concepto de dicho sujeto. (Ejemplo: Pedro viste
una camisa azul. El vestir una camisa azul no está implícito
en el concepto de Pedro)
Relaciones entre ideas: se
expresan mediante juicios analíticos, que son aquellos en
los que lo que se define o predica del sujeto está incluido en el
concepto mismo, de tal manera que de afirmar lo contrario, no se respetaría
el principio de no contradicción. (Juan de la Vega es una persona.
La condición de persona está implícita en el concepto
de Juan, de tal manera que si afirmamos lo contrario, Juan no es una persona,
estaríamos cometiendo una contradicción)
Aún así, es
cierto que los juicios analíticos no se relacionan directamente
con las experiencia. Todas las ciencias formales (lógica, matemáticas)
están formadas de juicios analíticos.
Admitiendo la distinción
entre impresiones e ideas, partiendo del criterio de verdad (sólo
son verdaderas aquellas ideas de las que podamos tener impresiones), y
partiendo de que las ideas analíticas son el resultado de procesos
mentales sin relación directa con las percepciones, llega a la conclusión
de que el límite del conocimiento no es como en Locke el conocimiento
sensible unificado por las 3 sustancias (Yo, Dios, Mundo), sino que nuestro
conocimiento de la sustancia es inválido porque está basado
en la casualidad. Por tanto, si rechaza las sustancias y el principio de
casualidad, nuestra experiencia no se puede constituir o unificar. Solamente,
dice Hume, podemos captar la continuidad o contigüidad de las impresiones
a través de la memoria, y conocer fenómenos que
no mantienen entre sí una conexión real. Con esto estamos
negando la ciencia, basada en el principio de casualidad (asignar
a todo efecto una causa) y reducimos nuestro conocimiento de la realidad
a meras impresiones aisladas. Llegamos pues a una postura escéptica,
que constituye una corriente filosófica denominada fenomenismo.
El emotivismo moral de
Hume.
Está influido por
Newton, coetáneo, fundador de la física moderna. Hume, al
igual que Newton había hecho con la física, pretende la
creación de una ciencia del hombre, del conocimiento humano.
De esta perspectiva es donde
Hume estudia la moral. Sus posturas se pueden resumir en 3 planteamientos
recogidos en su Tratado sobre la Naturaleza Humana, donde concreta posturas
de anteriores filósofos como Shaftesbury y Hutcheson:
La razón no fundamenta
nuestros juicios morales porque cualquier código moral se puede
reducir a un conjunto de juicios, en los cuales se da una aprobación
o desaprobación; es decir, los juicios morales determinan nuestra
conducta.
Hasta ese momento, sobre
todo la filosofía griega, la virtud se había identificado
con la razón.
La razón no determina nuestra
conducta ni la prohibe.
Recordemos que para Hume
la razón puede clasificarse en relaciones entre ideas y relaciones
entre hechos. Pues bien, ninguna de las dos va a determinar nuestra conducta,
la una por no tener en sí misma aplicación concreta, al reducirse
a meros universos intelectuales que no se contradicen y que vamos desarrollando;
la otra porque por más que observemos un hecho objetivo en la realidad
no podemos apreciar el bien ni el mal.
De las dos afirmaciones anteriores
podemos deducir que los juicios morales no provienen de la razón.
Para explicar de donde provienen los juicios morales, Hume afirma que objetivamente
no tenemos impresiones de la virtud o del vicio, y que éstos provendrán
pues de algo subjetivo: los sentimientos.
Por tanto reduce a un nivel
emotivo la moral. Esta corriente se denomina emotivismo moral, corriente
que llega a nuestros días a través del neopontivismo lógico.
En ocasiones no tenemos la
sensación de que los juicios morales provengan de los sentimientos.
Los sentimientos son unos elementos que se suelen confundir con la razón
frecuentemente; esto ocurre porque los sentimientos no son controlables.
Hume los considera como algo natural y desinteresado, al contrario de Hobbes
que defiende la tesis egoísta. En estos sentimientos influyen los
juicios morales; esta es precisamente su función, despertar un sentimiento
en los demás.
Berkeley,
George
(1685-1753)
filósofo y clérigo
irlandés, considerado el fundador de la moderna escuela del idealismo.
Berkeley mantenía que no se puede concebir que la materia exista
con independencia de la mente; los fenómenos de los sentidos sólo
pueden explicarse suponiendo que hay un dios que provoca de forma continua
la percepción en la mente humana.
Nacido en County Kilkenny,
Irlanda, el 12 de marzo de 1685, estudió en el Trinity College de
Dublín, de cuyo cuerpo docente llegó a ser miembro en 1707.
En 1710 publicó Los principios del conocimiento humano. Al no convencer
a la gente de su teoría, publicó una versión más
popular, Los tres diálogos entre Hylas y Philonus, en 1713. Sus
exposiciones de su filosofía fueron consideradas como descabelladas
por sus contemporáneos. Mientras tanto, había sido ordenado
diácono de la Iglesia anglicana de Irlanda y fue un destacado pastor
protestante. En 1728 viajó a Estados Unidos con intención
de crear una escuela misionera en Las Bermudas. Aunque abandonó
su proyecto en 1732, tuvo mucha incidencia en la educación superior
de este país, ayudando al desarrollo de las universidades de Yale
y Columbia y otras numerosas escuelas. En 1734 fue nombrado obispo de Cloyne,
donde permaneció hasta su retiro. Murió el 14 de enero de
1753 en Oxford.
Berkeley desarrolló
su teoría filosófica como una respuesta al escepticismo y
el ateísmo. Afirmaba que el escepticismo surge cuando la experiencia
o las sensaciones se encuentran desligadas de los objetos, no dejando ningún
camino posible para saber de ellos excepto a través de las ideas.
Para poner fin a esta disociación, una persona tiene que reconocer
que el "ser" de las cosas sensibles consiste sólo en que son percibidas.
Todo lo que es percibido es real, por eso las únicas cosas cuya
existencia se puede conocer son aquellas que se pueden percibir. Berkeley
insistió, no obstante, en que las cosas sí tienen una existencia
fuera de la mente humana y sus percepciones, pues las personas no pueden
controlar las ideas que tienen. En consecuencia, debe haber una mente en
la que existan todas las ideas, un onmipresente espíritu infinito,
a saber, Dios, que lo percibe todo.
El sistema filosófico
de Berkeley eliminaba cualquier posibilidad de conocimiento de un mundo
externo material. A pesar de que su sistema tuvo pocos seguidores, sus
críticas a los razonamientos sobre un mundo separado externo y al
concepto de la materia fueron poderosas y han influido en los filósofos
posteriores.
INTRODUCCION
AL PENSAMIENTO DE EMMANUEL KANT
1.El Estado de las ciencias
Desde cuando Renato Descartes
escribió sus meditaciones metafísicas
hasta la primera edición critica de la razón pura de Kant,
los hombres de ciencia mayormente filósofos y cartesianos venían
realizando tales logros en el conocimiento humano que todo lo anterior
aquellos hombres lo verían como la prehistoria de la razón
humana.
Algunos de esos logros son:
En Matemáticas: Primero
la geometría analítica de descarte, luego el calculo de probabilidades,
que fue invención de otro filosofo francés Blas Pascal. Y
para terminar, para remarcar solo los eventos mas espectaculares en la
historia de esta ciencia, un hecho destacable que quedo como índice
de la "Sintonía espiritual de la época": En 1684 el filosofo
Alemán Gottfried Wilhelm Leibniz (1646-1716), prosiguiendo con el
estilo de los trabajos analíticos de Descartes y Pascal publica
sus investigaciones sobre calculo diferencial aunque Isaac Newton había
llegado 14 años antes al mismo resultado.
2.Respecto a la Física
Fue Isaac Newton (1642-1727)
quien empezó a cumplir el sueño de galileo y toda la mecánica
moderna:
Englobar toda la variedad
de los movimientos en solo unos pocos principios racionales y ojalá
como una sola formula universal.
En el año 1687 Newton
publica "Principio Matemáticos de la filosofía natural" fue
ahí donde apareció con gran sencillez la formula de la gravitación
universal: "Dos puntos materiales cualquiera pueden ser considerados como
sumidos a una atracción reciproca, proporcional a sus masas y en
razón inversa al cuadrado de su distancia"
Así, Newton ponía
fin a la división Platonico-Aristotelica y medieval entre lo que
ocurre en el cielo (Zona de movimiento continuo perfecto) y la tierra (Zona
de movimientos discontinuo imperfecto. Newton supo enmarcar en una sola
explicación la caída de una manzana del árbol y "la
caída" de la Luna y en general, la leyes de la caída libre
de los cuerpos terrestre, propuesta por galileo y las leyes de Kepler referidas
a los movimientos astrales, todo esto referido al macrocosmos.
Respecto al microcosmos:
Lavoisier, descubre la descomposición del agua y aísla el
elemento oxigeno. Y así demuestra que la respiración es una
combustión, eliminando así la teoría del flogisto.
Antonio Van Leewnhoeck gracias al microscopio descubrió el Espermatozoide;
Hooke y Malpighi cada cual por su parte logran penetrar en lo mas básico
del orden vital: La célula.
De esta forma la conquista
teórica de la realidad se veía como una obra de la razón
guiada por su herramienta: Las Matemáticas. La razón humana
podía decir que había ganado el derecho a proclamar su total
economía (frente a la religión por ejemplo) y a considerarse
el supremo tribunal de todo lo que le rodea.
Respecto de las ciencias
humanas: Tenemos 2 actitudes la de la razón física promovida
por hombres que vislumbran una reforma de las costumbre y la vida política
y el otro caso casi solitario del pensamiento moderno es el de Juan Bautista
Vico (1668-1744) humanista quien no se entusiasmo con aquella razón
física basado en el principio de que solo es posible conocer lo
que la razón produce o crea. A la naturaleza la a creado Dios por
lo tanto el hombre jamas podrá conocer su intimidad su ser originario,
la naturaleza puede ser pensada no entendida.
Sobre las posiciones de sus
adherentes, la filosofía se había venido polarizando en dos
escuelas el Racionalismo y Empirismo.
"Y no hay
ningún descubrimiento que haya producido en las ciencias matemáticas
una revolución tan feliz y tan rápida como la del análisis
infinitesimal; y ninguna que haya suministrado medios más simple
ni más eficaces para penetrar en el conocimiento de las leyes naturales."
Lázaro Carnot, Maestro del pensamiento científico, Gauthier.
EL RACIONALISMO
En pocas palabras su argumento
era: No hay ningún inconveniente insalvable en dudar de todo lo
que ven mis ojos o lo que tocan mis manos. La razón es que lo que
estoy viendo o tocando podría ser el producto de un sueño
(o del mero pensar) y por ultimo porque cabe que las cosas si es que hay
alguna sean radicalmente distintas como las percibimos.
Inclusive no hay irracionalidad
alguna en negar cosas que antes creía existentes debido a una fe
natural y que eran en si tales como las percibía incluso es aconsejable
mantener un permanente estado de negación frente a tantas cosas
engañosas inciertas o ambiguas.
Así mismo aunque puedo
negar muchas cosa, dudar renegar de ella mientras lo hago no puedo dudar
de que estoy pensando, por tanto mi pensamiento negador no puede ser negado.
En conclusión hay
cosas como la verdad y el pensamiento que no pueden ser puestas en duda,
son en el sentido estricto de la palabra, principios.
Hay, pues leyes supremas
como pilares de nuestro pensamiento ya que hacen de nuestra experiencia
sensible algo coherente y comprensible.
Ahora bien, el racionalismo
"no critico" supone que estos principios que gobiernan el pensamiento para
pensar la realidad, son los principios con lo que se rige la realidad.
Así en la naturaleza, para ciertos hechos "causas" le siguen unos
hechos llamados efectos. Por ultimo, el racionalismo suponía que
la realidad encuentra su mas perfecta expresión en el lenguaje matemáticos
el que es también la mas rigurosa expresión del pensamiento.
EL EMPIRISMO
Se fundamento en el pensamiento
de filósofos como John Locke en el siglo XVII y George Berkeley
y David Hume en el siglo XVIII .
Tiene el mismo punto de partida
des racionalismo "el testimonio de la conciencia como criterio de la verdad".
Según el empirismo el conocimiento cierto de algo reside en que
el sujeto solo describa lo que en ese momento esta afectando su sensibilidad,
o sea atenerce a la información dada por los sentidos sin interpretarlos
o completarlos con aportes de su propia subjetividad.
En la sensación hay:
colores, formas, movimientos, olores, ruidos, etc. Estos son los datos
elementales del conocimiento todo lo demás es derivado, de las combinaciones
de elementos resultan los objetos y sus relaciones.
En resumen el emperismo sostiene
como tesis fundamental que a toda realidad del mundo externo debe corresponder
una o varias sensaciones posibles y sino las encontramos, tal realidad
no existe.
Pero si desde el mundo exterior
volvemos a nuestra propia realidad pensante y nos atenemos a lo que se
da aquí, también aquí solo percibiremos hechos: temores,
recuerdos, dolores, deseos, etc. El encadenarlos todo juntos asen suponer
la existencia de una sustancia alma.
En resumen, el empirismo
afirma:
a)Todo conocimiento real
tiene como única fuente los sentidos.
b)Los sentidos nos dice como
ocurre tal cosa pero no nos garantizan que debe ocurrir así.
c)La idea de una conexión
necesaria entre a y b no tiene su origen en los sentidos.
d)La teología y la
metafísica al aplicar los principios subjetivos mas allá
de toda experiencia, en el ámbito del pensamiento puro no constituye
saber alguno sino meras ilusiones.
LA REVOLUCION
COPERNICANA DE KANT
Kant se hace tres preguntas
cruciales:
a)¿Qué puedo yo llegar
a saber?b)¿Qué debe hacer?c)¿Qué me cabe esperar?
En palabras de Kant:
"Puedo pensar lo que quiera,
con tal de que no me ponga en contradicción conmigo mismo, es decir,
con tal de que mi concepto sea un pensamiento posible aunque yo no puedo
asegurar si en el conjunto de todas las posibilidades hay o no un objeto
real que le corresponda"
"Todo pensamiento
debe referirse en último término, directa o indirectamente,
mediante ciertos signos, a las intuiciones y, por consiguiente, a la sensibilidad,
pues de otra manera ningún objeto podría sernos dado".
Kant, Crít.
Ras. Pura.
Según Kant entramos
en relación con los objetos mediante ciertas facultades o poderes
que sujeto posee que son dos:
1.El modo básico: Es como
entramos en relación con algo distinto a nosotros a través
de los sentidos, de esta forma somos afectados directa e inmediatamente
por los objetos. Aquí y ahora esta lo que estoy viendo o estoy tocando,
es un modo en que algo se nos da como real y se llama intuición
sensible o empírica.2.El entendimiento: Todo este material sensible
es distinguido, relacionado, unificado, etc. Por medio de conceptos que
me permita representar el objeto en toda circunstancia.
Cuando ambas facultades se
aplican a los datos recibidos estos logran ser entendidos.
ACERCA DE LA
VALIDES DE LOS JUICIOS
Lo que hace el juicio es
declarar algo de algo o sea tiene la estructura de sujeto-predicado, el
predicado es lo que se declara, afirma o niega del sujeto y concentrándonos
en lo que dice cualquier predicado de cualquier sujeto, tenemos dos posibilidades:
a)El predicado dice algo que ya tuvo
que ser pensado en el concepto sujeto (Juicio analítico).b)O bien,
el predicado agrega una información no pensada en el concepto sujeto
(Juicio Sintético).
Referente al Juicio Analítico,
lo que dice el predicado es solo una nota constitutiva de la cosa en que
estamos pensando , o sea que sin ella no podríamos pensar en tal
cosa. Como lo que hace no es otra cosa que confirmar en el predicado lo
ya pensado en el sujeto o sea afirmar la identidad de nuestro pensamiento,
nunca temeremos caer en contradicción al hacer uso de tales juicios.
Seria absurdo verificar usando los sentidos si tal juicio analítico
es verdadero o falso. Basta con analizar el sujeto en su constitución
para saber si tal juicio necesariamente verdadero, es lo que Kant llama
"Verdad a priori" .
La otra posibilidad:
El Juicio Sintético
esto es cuando el predicado dice algo que no estaba incluido en la connotación
del sujeto. Es cuando realmente se gana una información sobre el
sujeto. Suponiendo que los conceptos que constituyen el sujeto S sean los
conceptos A,B,C en el predicado afirmamos D, G, etc. O sea cualquier concepto
que no forma parte de S.
Ahora bien, esta clase de
juicios se obtienen a partir de una varias o múltiples experiencias
y su valides no esta asegurada como en los juicios analíticos, solo
por descomponer el sujeto, sino que dependerá de que una nueva experiencia
confirme lo que el juicio declara. Son lo que Kant llama "Juicio de experiencia"
o "Juicios sintéticos a posteriori", ya que esa información
extra proviene de una experiencia real o imaginaria. En resumen: Un juicio
de experiencia por tener una unión accidental entre sus términos
siempre tiene la posibilidad de ser desmentido por la misma fuente que
lo constituyo y esta es su fragilidad.
"Puedo pensar
lo que quiera, con tal que no me ponga en contradicción conmigo
mismo, es decir, con tal de que mi concepto sean un pensamiento posible,
aunque yo no pueda asegurar si en el conjunto de todas las posibilidades
hay un objeto (real) que le corresponda". E. Kant, Crít. Raz. Pura.
Como conclusión: el
conocimiento sensible (la experiencia) nos enseña como ocurren las
cosas en la naturaleza pero no dice que necesariamente tengan que ocurrir
así. Esto es el postulado básico de la filosofía de
Emmanuel Kant. Así, existen dos tipos de juicios: los de experiencia
o sintéticos a posteriori y en los que el predicado pertenece al
concepto sujeto, sin embargo ninguno de estos juicios produce conocimiento
alguno.
Supongamos la existencia
de juicios con estas característica:
A)Que dan una información
real sobre las cosas. Juicios sintéticos.B)que tienen los rasgos
de necesidad y universalidad de los juicios analíticos.
Si nos ceñimos al
postulado básico del kantismo, nos queda que un juicio necesario
y universal será por fuerza a priori.Ahora se nos abre una nueva
perspectiva que no hemos observado "el aquí y el ahora" son condiciones
universales y necesarias para que algo ocurra en la realidad, todo lo que
existe físicamente, existe necesariamente en un espacio universal
y cambia o se modifica en el curso del tiempo .Del tiempo podemos decir
que no es inconcebible que algo no exista dentro del tiempo, entonces debemos
preguntarnos ¿qué son el espacio y el tiempo? ¿Son
acaso objetos que percibimos sensiblemente como las cosas? Si así
fuera no tendrían el carácter de condiciones necesarias y
universales de toda existencia y se podrían expresar mediante juicios
de experiencias.
Si examinamos esto veremos
que las proposiciones referentes al tiempo y al espacio cumplen con los
rasgos de los "juicios sintéticos a priori".
Algunos ejemplos:
1.Diferentes tiempos no son simultáneos
sino sucesivos.2.Diferentes espacios no son sucesivos sino simultáneos.3.Tiempos
diferentes no son sino partes de un mismo tiempo (El tiempo es uno).4.Espacios
diferentes no son sino partes de un mismo espacio (El espacio es uno):5.El
tiempo tiene dos y solo dos dimensiones (pasado y futuro)con un limite
común el presente.6.El espacio tiene dos y solo dos dimensiones
(interior y exterior).7.Todo cuerpo y todo fenómeno poseen duración
son necesariamente temporales.8.Todo cuerpo posee extensión (largo,
ancho y alto).Es necesariamente espacial.9.Toda unidad de tiempo puede,
a su vez, ser dividida en unidades menores, y estas en otras, indefinidamente
(Infinito intencional).10.Toda unidad espacial puede ser dividida en unidades
menores y estas en otras, indefinidamente.
Así tenemos, en resumen,
que tiempo y espacio son los fundamentos de la ciencia matemática
,pero además ,tiempo y espacio son las condiciones universales y
necesarias
de toda cosa existente "en
el mundo": el espacio ,condición de todos los cuerpos ; el tiempo,
de los cuerpos y la conciencia, pues todo fenómeno síquico
necesariamente ocurre en el tiempo.
Sin embargo, el espacio y
el tiempo ¿donde ocurren?. Suponemos que las condiciones de la realidad
tanto física como síquica debieran a su vez ser reales, entonces
el tiempo es una realidad física,¿ pero como llamar realidad
física a algo que no se compone de nada físico? Entonces
concluimos que el tiempo no es algo real ni físico. Solo nos queda
la alternativa de que sea algo subjetivo, una manera de recibir y ordenar
el material sensible en la intuición o forma que solo reside en
el sujeto que conoce y actúa.
Respecto del espacio Kant
hace una afirmación que resulta paradojal ¿qué no
es el espacio algo visible para todos? Y si esto no fuera real ¿qué
sucedería con las cosas que están en el espacio? ¿Que
suced3eria con las cosas del mundo atómico? Y las galaxias, las
Estrellas ¿dónde quedarían?.
Obviamente esto resultaba
muy extraño a los científicos de aquella época los
que, siguiendo las enseñanzas de Newton concebían toda la
realidad sobre la base de un espacio universal geométrico, homogéneo.
Enfrentamos una difícil
disyuntiva: o el espacio es algo no físico, infinito, incorruptible.
Y condición necesaria
de cuanto existe, en cuyo caso tenemos que reconocer que lo estamos concibiendo
como una especie de todo absoluto, de dios presente en todas las cosas,
o bien, el espacio no es nada real sino un modo humano de recibir las impresiones
en la intuición y de ordenarlas según relaciones universales
y necesarias.
"En la lógica
trascendental aislamos el entendimiento (como antes la sensibilidad, en
la estética trascendental),y no consideramos en nuestro conocimiento
sino aquella parte del pensamiento que tiene su origen únicamente
en el entendimiento "
Están son, junto ala
teoría platónica de las ideas las dos afirmaciones mas audaces
que se hayan hecho en filosofía.
Debemos conformarnos por
ahora con al menos una conclusión impostergable, el modo básico,
primario que tenemos de entender las cosas es a través de los sentidos
o lo que Kant llama "intuición empírica". O sea la relación
con un objeto por medio de la sensación.
Lo que sigue es una respuesta
totalmente negativa a la pregunta hecha el principio ¿Qué
puedo yo conocer? , lo que jamas podremos conocer es la realidad en si
misma, ya que el conocimiento mas directo que se tiene de ella ,el intuitivo
esta gobernado por formas de recepción y ordenación dependientes
del sujeto.
Pero como advertimos, en
nuestro conocimiento convergen dos fuentes principales del espíritu:
la capacidad de recibir u ordenar las impresiones, sensibilidad; y la capacidad
de conocer o reconocer un objeto: el entendimiento
UNIDAD ENTRE
LA SENSIBILIDAD Y EL ENTENDIMIENTO
(¿Cómo es que
conocemos?)
Para constituir el pensamiento
humano no basta con la mera recepción de los datos sensibles. De
acuerdo al kantismo el conocimiento es una actividad, una construcción.
Y en esto consiste la función del entendimiento: enlazar y estructurar
los datos de la intuición
conforme a su propia ley.
Por eso Kant llama al entendimiento "La facultad del juicio".
La primera y mas fundamental
actividad del entendimiento es discernir lo sentido del sentir: el hecho
de tener conciencia de algo que se siente en relación al fenómeno
subjetivo de sentir. Tal discernimiento no puede provenir de los datos
mismos sino del sujeto activo que los juzga y los contrapone a si mismo.
En todo sentir no solo se
siente sino que hay un yo que siente lo que me pasa, en todo recordar hay
un yo que recuerda, en todo olvidar, un yo que se acuerda de haber olvidado.
Para Kant el yo que acompaña
a mis percepciones no es una cosa espiritual que se observa a si misma,
así como el espacio y el tiempo tampoco eran cosas en el mundo exterior
El yo es una representación
que me hago del alma y que acompaña necesariamente a todas las representaciones
que tengo de objetos. Una percepción de mis percepciones sea una
apercepción.
Esta representación
que acompaña a todas mis otras representaciones no solo acompaña
a cada una, sino que se proyecta como el yo uno y el mismo en medio de
las representaciones que recorre y unifica.
El yo no es un dato que nos
de la experiencia interior y que por tanto provenga de ella ,esta identidad
es una condición absolutamente necesaria para que siquiera podamos
hablar de una experiencia , o sea es una relación a priori.
Veamos el otro lado de la
estructura: las representaciones de lo conocido, lo percibido por el yo.
En el conocimiento no nos limitamos a tener conciencia de las impresiones
que nos afectan, no conocemos nuestras impresiones sino cosas ubicadas
en un espacio universal.
Galileo llamaba síntesis
a la reunión de varias observaciones en la unidad de la ley, para
Kant es la operación inconsciente de reunir afecciones y representaciones
y resumir su diversidad en un solo conocimiento.
En resumen: es una actividad
del entendimiento incluir toda la dispersión temporal en un solo
tiempo universal y toda la dispersión espacial en un solo espacio
universal.
Kant lo llama la "síntesis
pura de la aprehensión".
Ahora bien el conocimiento
es la unidad entre una facultad pasiva (sensibilidad) y una activa (entendimiento)del
espíritu. Por tanto el conocimiento por conceptos no es un conocimiento
aparte y que solo a veces se alcanza, sino el único posible para
la mente humana. Hay que decir que este conocimiento se logra mediante
la experiencia, aunque no proviene enteramente de ella.
¿Cómo saber
si hay otros conceptos a priori y cuantos?
El pensamiento es en ultima
instancia, síntesis de conceptos, producción de juicios y
así es como el entendimiento representa la realidad. Si pudiéramos
determinar, independiente del contenido de cada juicio, los modos exactos
de estructurar los conceptos en un juicio, en palabras de Kant "las funciones
de los juicios", conoceríamos los modos correspondientes en que
estructuramos los datos sensibles a fin de pensarlos. En otras palabras:
conoceríamos los modos de ser que atribuimos a la realidad: las
categorías.
"Supongamos
que yo ahora me levanto, por ejemplo de ala silla,
libremente
y sin influjo de las causas naturales. Con este hecho... empieza absolutamente
una nueva serie de hechos... imputables solo y exclusivamente a mi voluntad"
(Kant, Crit.
Raz. Practica)
¿QUÉ PUEDO
HACER? (La Etica Kantiana)
La inteligencia humana no
se conforma con operar dentro de una cadena de fenómenos condicionados
y dependientes unos de otros, es decir no se conforma con limitar su jurisdicción
solo alas cosas naturales. Una especie de apetito racional lo obliga a
ir mas alla, a alcanzar lo no dependiente, lo incondicionado, lo absoluto
de lo cual hará depender finalmente todo lo condicionado.
Y esto lo justifica así:
si no existiera el ente incondicionado que planteo, entonces, todo comienzo
seria subalterno, pues siempre por definición, dependería
de algo anterior, entonces sin un comienzo absoluto, nada habría
llegado a ser, ni nada podría entenderse. ES necesario entonces
admitir la existencia de un Dios creador de la naturaleza
El argumento nos hace ver
en que consiste la exigencia racional que se menciono: es tratar de dar
a nuestra existencia un fundamento y someter la idea de relativo y condicionado
a algo incondicionado y absoluto o a una espontaneidad (Dios)que inicia
la serie de fenómenos relativos.
La razón atribuye
a la voluntad humana la facultad de decidir y el poder de iniciar, desde
ella, fenómenos que de no haber tenido origen absoluto en esa voluntad,
no hubiesen ocurrido.
Esta es la tesis
Tanto a esta libertad como
ala atribuida a Dios, Kant las llama "Libertades trascendentales"
Esta es la antítesis
Así, un tal concepto
de libertad es meramente especulativo(propio de la razón pura).y
al igual que con Dios, bien puede afirmarse o negarse la existencia de
aquella libertad .
No obstante, los hombres
somos sujetos morales, y así en la vida a veces surge una experiencia
de libertad que representa la única posibilidad que tenemos de ver
ese mundo incondicionado al que se nos negó el acceso por la vía
puramente especulativa.
Un hombre se determina actuar
por motivos, razones, necesidades subjetivas etc. Tenemos los hombres,
la capacidad de sopesar los hechos, de postergar tal o cual movimiento
en vista a obtener tal o cual ventaja suplementaria; en pocas palabras,
podemos valorar nuestras posibilidades y actuar conforme a ellas.
"Ni en el
mundo ni en general, tampoco fuera del mundo, es posible pensar nada que
pueda considerarse como bueno, sin restricción, a no ser tan solo
una buena voluntad"
(Kant, Fundamentacion
de la metafísica de las costumbres)